UNA MARATÓNICA SESIÓN DE MÚSICA

El Festival Sin Techo Rock tuvo más de diez horas de música con bandas locales y el cierre de Eruca Sativa.

Con el son iluminando casi horizontalmente, tiñendo todo el paisaje de un cálido tono anaranjado, llegamos al predio de la Sociedad Rural de Villa María para cubrir y disfrutar del Festival Sin Techo Rock. Todo estaba preparado, con un despliegue enorme, de la talla de los grandes festivales del país.

Un escenario principal y otro secundario, un campo de grandes dimensiones que poco a poco se fue cubriendo con gente que llegaba desde dentro y fuera de la ciudad, carros de comida, puestos de venta de objetos e indumentaria, sillas y mesas para el LiveArt, carpas para las conferencias de prensa, mucha gente trabajando –identificada con la remera oficial del festival-, vasos también con la inscripción de “Sin Techo Festival Rock”, drones registrando el evento desde las altura y hasta un globo aerostático inflándose a un costado del escenario, para ver a las bandas de una manera diferente.

La música comenzó a sonar pasadas las 19 hs y no paró hasta las 6 de la mañana, casi mediodía de rock –y pop- donde las bandas fueron una sola sonoridad, con variaciones de climas y estilos.

Entre grupo y grupo que iban pasando en el escenario principal, durante la primera parte de la noche, no había silencio, sino que las melodías se trasladaban al LiveArt, donde se presentaron Cárdenez y Los Vicios, Sergio Cuello y Mondino con su banda, todos en sus formatos acústicos.

Una auténtica maratónica sesión de música coronada con el cierre de Eruca Sativa, que volvió a presentarse en territorio cordobés después de mucho tiempo.

Esta iniciativa es para aplaudir, a toda la gente que llevó adelante este evento de enorme magnitud, apostando al rock y a las bandas locales, obteniendo una gran respuesta de la gente que se acercó a disfrutar de la música bajo las estrellas.

Esperemos sea el primero de muchos “Sin techo Rock”.

Fotografía de Flor Garello.