AL FIN SUCEDE

La banda de Río Tercero, Hipnótica, se presentó en Me Matan Limón y fue acompañada por Albina, grupo debutante en la noche.

Una banda debutante y otra creciendo a paso firme, compartieron una noche en la que confluyeron dos formas distintas de hacer una canción, pero con un espíritu similar. Albina con un formato banda e Hipnótica con su dúo electrónico-experimental, se complementaron muy bien y brindaron un show que dejó más que conforme a sus espectadores.

Hipnótica es una banda de Río Tercero, pero que ya se ha presentado en variadas oportunidades en Villa María y Villa Nueva, y es más que conocida y escuchada por formar parte del sello digital “Discos del Bosque”, junto a bandas locales como De La Rivera y Rayos Laser. Pero no sólo es conocida por eso, sino también porque su música resulta más que atractiva, con estructuras de canciones sólidas, como su hit “Mi nombre”, que se escuchó por todos lados hace un tiempo.

Albina se hizo cargo de abrir la noche en el Bar Me Matan Limón, tocando por primera vez en público, no tuvieron problemas para demostrar que se
toman muy enserio este proyecto musical. Confiados y con mucha actitud,los chicos comandados por Rodolfo Azzollini –cantante- tocaron sus canciones sin fisuras, estimulando al público con sus melodías pop, por momentos muy tranquilas y por otros con estribillos para corearlos con fuerza. Albina mostró un estilo definido, melodías trabajadas, un sonido con teclados bien presentes y letras con mucho sentimiento.

Luego de los chicos encargados de romper el hielo, llegó la banda de Río Tercero. Con mucha gente esperando escucharlos, comenzaron con las canciones de su último disco titulado “Ese Lugar Mágico”. Llenos de aparatos alrededor de cada uno de ellos –sintetizadores, notebooks, pedales de efectos y demás-, de los que salen esos sonidos futuristas que componen la raíz del estilo de Hipnótica, el dúo desembaló toda su sonoridad y la desparramó por todo Me Matan Limón. El estilo hipnótico se encuentra entre la pasividad más extrema y el pop más experimental, lo que genera un clima de expectativa constante, de que algo está por ocurrir, hasta que al fin, sucede.

Durante el show del dúo, integrado por Nahuel Barbero y Hernán Ortiz, se proyectaron visuales a cargo de Iván Pierotti, quién expresó en colores las melodías creadas por los músicos.