PABLO FALÁ: «CONSTRUIMOS ‘PARAÍSO’ MIENTRAS FILMÁBAMOS»

Hablamos con el director que estará hoy en el Espacio INCAA para presentar su ópera prima.

Este fin  de semana el Espacio INCAA de Villa María exhibirá entre sus propuestas del séptimo arte, Paraíso. El largometraje de ficción fue producido por los villamarienses Julián Palacios y Marcos Mossello y podrá verse hoy jueves 02, mañana viernes 03 y el domingo 05 de mayo a partir de las 21.30 horas.

“La memoria y después”, la otra propuesta documental de este espacio que depende de la Secretaría de Cultura, la Municipalidad local y el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, será proyectada el domingo a las 18.30 hs.

Dialogamos con el director de Paraíso, el cordobés Pablo Falá que nos comentó sobre su ópera prima, el tratamiento aplicado –en términos audiovisuales- y sobre el futuro del audiovisual en las plataformas digitales.

Entrevista

-¿Podés comentarnos un poco sobre la trama de “Paraíso”?
-La película va de una chica que se llama Sofía, que vuelve de un viaje, de estar mucho tiempo afuera regresa a Córdoba y se reencuentra con algunos conocidos, entre ellos un ex novio que dejó cuando se fue. Ella viene con toda una seguridad que le da el viaje, y el haber estado afuera. Viene con esa impronta pero lentamente se va dando cuenta que no está encontrándose a sí misma y menos con la gente local.  Es un momento en la vida de un personaje que tiene todo este transitar en un momento particular. Se va encontrando en un torbellino que no la deja en ningún lugar.

-Con respecto a esta cuestión de la “transición” que trata la película, ¿se está planteando en el cine nacional actual?
-Yo creo que sí se tratan. Justamente nos encontramos en el Festival de Santiago del Estero con Nadir Medina que venía estrenando “Instrucciones para flotar un muerto”, y nos encontramos con una temática parecida. Eso me hizo mucha gracia. Creo que el hecho de vivir en una generación en la que en el 2001 todo el mundo se fue del país por una cuestión económica, en un éxodo que ahora se está empezando a dar en cualquier momento, creo que habla de que tenemos treinta y pico de años y en un momento se iban todos y después volvían a Argentina.

-¿Cómo surgió “Paraíso”?
-No la escribí sólo, lo hice con Marina (Arnaudo) y teníamos muy poco tiempo para escribir. Nos propusimos hacer la película en un año y, entonces, empezamos a indagar en el viaje de ella, que venía del exterior. Empezamos a alimentar la película de nuestra experiencia en relaciones de pareja que habíamos tenido, relaciones tóxicas, no tóxicas, lo bueno, lo malo. Comenzamos a usar lo real que cada uno traía y lo que queríamos exponer, como una mezcla. Yo venía de transitar un posgrado de documentales y creo que eso me animó a poder trabajar en la ficción de otra manera.

-¿Cómo fue ese proceso de hacer un largometraje en un año?
-Es una locura pero en realidad veníamos con una idea de hacer un corto, y propuse hacer un largo. Había visto que Daro Mascambroni venía de hacer “Primero Enero” con un presupuesto muy chico y dije: “Hagamos una película también”. Quería continuar con esa forma de filmar. Trabajamos en un guión en seis meses y nos propusimos hacer la película y a fin de año salir a filmar. Trabajamos mucho con Marina y Fabio (Camino) sobre todo, que son protagonista y coprotagonista. Trabajamos con un guión que habrá tenido unas 35 páginas. Con los chicos de producción y los actores íbamos llenando esa historia a medida que íbamos filmando y viendo lo que hacíamos. Construimos a partir de lo que filmábamos. Un proceso que no te deja dormir en ningún momento. Fueron siete días de rodaje en un lugar hermoso, pero intensos.

-Como director  independiente, ¿cómo  ves la situación actual del cine Indie en Argentina?
-Estoy ahora metiéndome en educación y viendo otras maneras de filmar también porque estoy exponiendo accesos a la narración audio visual a través de dispositivos que son accesibles a todos, como los celulares. Al mismo tiempo, creo que el problema está en la distribución. Sigue siendo caro filmar, y siempre depende de los elementos con los que quieras filmar: cámaras, luces, lentes, cantidad de actores. Si bien es independiente, hay una puesta en valor del trabajo de todos y sigue siendo una cuestión cara. Pero en ese momento lo más complejo es la distribución, hasta para las películas que vienen por el circuito INCAA también. Las cuotas de pantalla no son fáciles de obtener y, no digo que sean imposibles, pero es difícil que todos accedan a un cine para ver una película.

-¿Cómo ha sido la carrera de la película y qué le queda para el futuro?
-Se exhibió en varios festivales, puntualmente en uno de la India, en otro de Nueva York, en el festival Leonardo Favio en Bolívar. Ha tenido un recibimiento y el festival de Santiago del Estero nos dio un puntapié inicial. El recorrido, lo que es la exhibición al público en general, está terminando. Era un logro que queríamos conseguir con la película, que se vea en el cine y no sólo en festivales. Estaremos por Villa María, después Córdoba y en algunos otros lugares. La idea luego es presentarla en la plataforma de CineAR, que quede ahí y se pueda acceder desde cualquier lado.

-Mencionás esa plataforma, ¿creés que es importante para el cine nacional?
-Me parece que hay que aprovechar la plataforma y hay que usarla. De hecho la forma de mirar películas está cambiando muchísimo. CineAR pasó a ser lo que era en su momento ver películas en la tele, con lo cual no hay que desmerecerlo. Todas las plataformas de ese estilo, como Netflix, van hacia ese lado, que podamos ver películas bien realizadas y desde tu casa. Las películas de cine nacional no son fáciles de conseguir.

-Ya es casi un ritual acercarse al CCC Leonardo Favio a ver cine nacional en el Espacio INCAA Villa María. En este sentido, ¿cuáles son tus expectativas para el encuentro cara a cara con los espectadores?
-No conozco el Espacio INCAA Villa María. De hecho acá teníamos uno pero fue cerrado. Que siga existiendo un espacio como el que describís me parece que está genial. Ir a presentar la película y hablar un poco con el público, conocer las miradas y tener un diálogo es un golazo.

Nota por Roque Guzmán.

Trailer