Entrevista a Peteco Carabajal. Por Valentina Ferreira.

En una charla íntima y profunda, Peteco Carabajal nos invita a reflexionar sobre su extraordinario recorrido artístico y humano, que este año celebra cinco décadas. Próximo a presentarse en la Peña Talamochita de Ribera Vivo junto a su proyecto Riendas Libres, el reconocido músico santiagueño nos habla de los lazos familiares que dan vida a este grupo, la evolución del folclore, y su compromiso con la autenticidad en cada composición y presentación.

Desde su visión sobre el impacto de la industria musical en las tradiciones, hasta la importancia de crear mensajes genuinos que trasciendan lo comercial, Peteco muestra su capacidad para reinventarse sin perder de vista sus raíces. Nos comparte detalles sobre su último disco, Legado Popular, un trabajo en el que explora su faceta como autor y productor, colaborando con artistas tan diversos como Jorge Rojas, Eruca Sativa y Luciana Jury.

El escenario que lo espera este sábado en Ribera Vivo será un reflejo de esa dualidad: tradición y renovación, alma y baile. Con su música, Peteco sigue emocionando y estremeciendo, mostrando que la evolución más significativa ocurre dentro del espíritu humano y en su capacidad de conectarse profundamente con los otros.

Además, show en la Peña Talamochita se completa con Shalaku y Angela Parodi. La entrada es un alimento no perecedero que en esta ocasión se destinará a la organización social Mermeladas Poderosas, un proyecto que trabaja para fortalecer el tejido comunitario a través de iniciativas locales.

Entrevista por Valentina Ferreira.

Muchas gracias por atendernos Peteco, es un placer para nosotros poder hablar con vos. Ya has estado otras veces en Villa María, esta vez nos convoca Ribera Vivo y su Peña Talamochita…
Así es, cada vez que podemos estar en algún lugar de cualquier punto del país, por más que ya hayamos ido o que sea la primera vez, es una alegría para nosotros porque significa trabajo, significa viajes, significa conocimiento, conocer nueva gente, nuevas relaciones y muchas cosas que ocurren en ese intercambio, a través de una Peña o de un festival. El lugar donde uno va son son las vivencias también.

En esta oportunidad venís con el grupo Riendas Libres, que sí bien hace ya unos años que están tocando es una novedad para Villa María. ¿Qué vamos a escuchar este sábado 23?
Riendas Libres es un grupo familiar integrado por Homero, Martina y Ricky qué son hijos míos prácticamente, salvo Ricky, pero es como un hijo porque se crió con nosotros y es muy de la familia. Entonces la música también se podría decir que es propia porque las composiciones que tenemos pertenecen a los dos discos que hemos sacado, uno es «El amor como bandera» y el otro es «Un viaje«. De ahí tenemos el repertorio como para presentar y por supuesto que a ese repertorio lo vamos mezclando con composiciones de otros momentos míos, canciones que ya están en el corazón, se podría decir, de mucha gente y que son lindas para mí poder cantarlas porque se genera algo especial, la verdadera comunicación que es a través del canto y son canciones que están en la memoria.

La gente baila mucho en cada presentación y nos damos el gusto de poder hacer algo de lo nuevo y de la música de siempre.

Mencionás que hay nuevas composiciones, ¿cómo trabajan eso en el grupo, las composiciones y los arreglos?
Las composiciones las hacemos con Homero, a veces él ha llegado a mi casa o a algún encuentro ya sea en el hotel o en viaje, de pronto me hace escuchar alguna cosa nueva, alguna melodía y bueno yo tengo ya un poco más de experiencia se podría decir, y también la voluntad de poder hablar y de poder escribir y decir «mirá qué te parece esa temática». Trabajar ahí con él así en vivo digamos, al momento, es lo más lindo.

Por ahí sí yo le hago escuchar una melodía a él todavía no está tan predispuesto al momento, en cambio yo sí, para para poder ver rápido el tema y poder plasmarlo en una letra, tengo más práctica con eso.

Pero eso es Riendas Libres, se conjuga la nueva vibración que tienen Ricky, Homero y Martina con mi experiencia y también con mis ganas, mi fuerza de estar sobre un escenario y de poder llevar el ritmo que ellos plantean, o que yo mismo planteo en una chacarera de movimiento, de baile. Bajar con el público, tocar y volver en una carrera al escenario y la última trofa hacerla como si estuviese haciendo gimnasia, con un poco de humor. Todo ese tipo de cosas son las que estamos compartiendo en este momento con Riendas Libres.

En tu caso este año estás celebrando 50 años con la música, ¿cómo ves la evolución del folclore en la actualidad o que artistas estás escuchando actualmente?
Es muy difícil hablar de ese tema porque la mayoría nos movemos dentro de una industria de la música, de distintas maneras, algunos la integran como empresarios, otros la integran como artistas, otros la integran como público pero entre todos formamos un poco parte de esas industrias.

Cuando uno llega a un punto profesional por ejemplo, graba discos, hoy en día se suben en las plataformas que hay para eso, hay todavía sellos de alguna manera multinacionales como Sony, EMI o Universal, o productores fuertes aquí también en Argentina, entonces la música que se da a conocer pasa por esos carriles y si yo tengo que analizar ese carril te diría que no ha habido una evolución que sea notoria y que haya superado lo que ya se ha hecho en los años 50, 60 o 70.

Te diría que se ha ido desdibujando por, justamente, seguir el camino que propone la industria, que hoy en día se busca que tengan matices tropicales por ejemplo, con ritmos que están definidos bajo «lo latino», entonces uno encuentra que los cultores que salían de la música folklórica y que han tenido éxito en estos últimos tiempos están cada vez más «latinizados» hasta para cantar, y la composición es un juego de niños.

Si yo lo tengo que ver desde mí, con lo que a mí me gusta la poesía, la buena música, los arreglos, la tradición… en definitiva la autenticidad. Es como que se ha alabado mucho ese crecimiento, entonces no se puede hablar así nomás de si ha habido evolución, hay que pensar hacia dónde o hacia qué.

Hoy en día, yo que tengo 68 años y que tengo batería, por ejemplo, en el grupo que toca Martina en determinados temas y en otros el bombo, yo con el bombo me conformo y con la guitarra criolla, ni siquiera la eléctrica, no se me da por querer ser el moderno de la guitarra eléctrica, aunque en un momento de juventud lo he sido.

Ninguna de esas cosas son la evolución para mí, pienso que la evolución es la evolución del alma de uno y de la comprensión del mundo, la comprensión del ser humano, de las tradiciones y de las transmisiones de conocimiento. De un montón de cosas que ya son inherentes al ser humano más que una cosa artística o del escenario, la vida es otra cosa.

Entiendo lo que decís, se trata de revalorizar y ser lo más genuino posible porque al fin y al cabo es eso lo que le llega a la gente…
Es así, lo has dicho sencillamente, ser lo más genuino posible y ese es un trabajo lindo para mí, apasionante, ir conociendo toda la historia de la música desde que yo soy chico hasta el día de hoy, con lo que venía de antes y no romper con eso sino hacerlo revivir en obras. Hoy la música me tiene que emocionar y me tiene que estremecer y sacudir de la misma manera que me sacudía cuando escuchaba las obras inmortales de Julio Jerez o de Andrés Chazarreta.

Hay que tener ese nivel de los inmortales y, al mismo, la vibración nueva se nota también, no hay que hacerla a propósito, es decir, se nota, vos podés hacer una chacarera común que quién la escuche sepa que es una chacarera que la puede bailar, con una melodía simple y la vibración se va a notar, se va a notar si es buena porque va a llegar cuando se conjugan letra y música.

Sí, incluso la poesía y lo lírico, yo creo que a la gente le llega un montón las canciones de estos nuevos discos con Riendas Libres, conectan mucho con las letras…
Eso es importante para nosotros, hoy en día el mensaje para mí es muy importante. Sentir y analizar muy bien sobre todo qué es lo que quiero decir, simple y profundo sobre uno mismo.

Ya que estamos hablando sobre esto y que vos sos mujer, me resulta que la mayoría de las canciones que escucho en la radio o en YouTube, la mayoría de las composiciones son cosificantes de la mujer y del folclore ni hablar, entonces para mí el crecimiento es escribir de una manera que rompa con eso, para que voy a hacer yo una canción hablando de «estoy enamorado de ti»… ¿para qué? ¿una más? ¿voy a seguir enturbiando el aire de la creación?

Hay que cuidar todas esas cosas ecológicas de la creación y también empezar a hablar de cosas importantes del ser humano, para la humanidad. Yo estoy pensando muchísimo en cuando hablo de algo que tiene que ver con la fé o con Dios, con ese Dios que la mayoría de la humanidad imagina, yo me estoy cuestionando mucho eso porque ya me desprendí de creencias con respecto eso. Por ejemplo mi hijo que tiene 16 años ya no tiene ninguna de las ataduras religiosas, ninguna, no le pasa por la cabeza a él eso. Vemos todo lo que hoy está pasando en el mundo con el poder de la humanidad, entonces cuando uno empieza a ver todo eso y a conocer y a viajar, a interesarse, se da cuenta que uno no puede seguir cantando las cosas simplemente por lo que te dicta una fé en algo que ni conocés.

A mí hay algo que siempre me llama la atención, como artista también, es que vos te interesas genuinamente por compartir tu música con otros artistas, hace poco volvió la juntada con Rally y el Dúo Copla Nacu, también has compartido con artistas villamarienses cómo Arrasa como Topadora, y tenés varias colaboraciones en tu último disco Legado Popular, ¿tenés pensado un nuevo proyecto o nueva música?
Bueno, en mi último disco «Legado Popular» que está compuesto por siete temas hay participaciones de diversos artistas e incluso ahora voy a subir siete nuevas canciones dentro de ese mismo trabajo, que es bastante distinto de lo que veníamos haciendo porque te podría decir que principalmente voy como autor. Le he dado por ejemplo a Jorge Rojas una canción y él ha hecho la producción como para su disco y ha hecho los arreglos sobre el tema, lo ha grabado en su estudio y después yo he viajado a Córdoba, a Alta Gracia, a ponerle una voz al tema. Lo estoy dando a conocer en los próximos días en Legado Popular, se llama «Deja el agua correr». También he hecho algo similar con «El cóndor» de La Bersuit, con la canción «Raíz y flor» él la sacó en su disco y yo lo edité en Legado Popular.

Otra colaboración que se viene es con Eruca Sativa.

bueno se vienen un montón de colaboraciones en esta faceta tuya de autor, compositor y productor también…
Sí, estoy haciendo de todo eso y con muchos músicos, con muchas cantoras de todo el país. De Legado Popular recomiendo que escuchen «Mariposa», una canción que hemos hecho con Marcela Morelo y que la he grabado con Luciana Jury y acompañado por el piano de Matías Chapiro, un trío hacemos ahí.
Todos los temas de este disco son distintos.

Se viene la temporada de festivales y queríamos saber ¿cómo se preparan para eso y si ya tienen más fechas confirmadas con Riendas Libres?
Hasta ahora festivales conocidos tenemos Cosquín, donde voy a celebrar mis 50 años con la música el 21 de enero, también vamos a estar en «Las Juntas» en la provincia de Catamarca y hay varias fechas más por delante. Vengo trabajando prácticamente sin parar desde abril pero muy contento y feliz por todo lo que estamos haciendo.